Vistas de página en total

jueves, 25 de enero de 2018

LA COMISIÓN DE GARANTÍAS.


Siendo estrictos y serios,  la Comisión de Garantías para que sea válida tiene que tener entre sus seis miembros por lo menos tres juristas. En las últimas elecciones hubo que ampliar el plazo porque no se cumplía el requisito de los tres juristas. Al final se consiguió, de una manera un poco extraña, que se cumpliera lo establecido por la normativa.
De los tres juristas elegidos, Estíbaliz, Javier y Marta, han dimitido dos por desacuerdo con el resto, pero ¿quién sigue? Pues Estíbaliz, la persona que en la anterior CGDN tan bien se entendía con Eduardo Santos.
Ahora con una jurista y tres no juristas sin la preparación necesaria, la Comisión tiene que desaparecer más que nada debido a la podredumbre actual.
 Quedan en La Comisión de Garantías:
-       Estíbaliz que ya estuvo en la Comisión anterior y fue incapaz de hacerla funcionar entre otras muchas cosas porque aun siendo la Presidenta nunca hacía nada sin el consentimiento o visto bueno de Eduardo Santos.
-       El no jurista Bonaventura, que tiene antecedentes de haber cometido irregularidades en el proceso electoral para elegir la Secretaría General porque era miembro del Comité Electoral y publicó el vídeo de la candidatura de Eduardo Santos por las RRSS, ni dimitió ni fue expedientado.
-       La no jurista Gracia, que junto con Bonaventura fue la que impidió votar a inscritos, que llevaban en el partido mucho más tiempo que ellos.
-       Y La no jurista Nieves, fue la que le dijo “bruja roja” a la presidenta de la Asociación Navarra de Escritores. Hace dos años, se le abrió expediente por estos hechos, cuando Eduardo Santos era miembro de la CGDN junto con Estíbaliz, tanto Eduardo como Estíbaliz no vieron gravedad alguna y el expediente se cerró sin más. El voto de dos sobre tres bastaba y ahora el voto de Nieves valdrá para lo que haga falta.
Contamos las personas que se mantienen en la CGDN y son cuatro y alguna de ellas iba en la lista de 20M.

Se puede hablar de crisis en la Comisión de Garantías Democráticas de Podemos Navarra desde el punto de vista de lo que se entiende la separación de poderes orgánica al uso, debido a que en la actualidad es inexistente.
Ya no se nos escapa a quienes hemos trabajado con dos excompañeros como Eduardo Santos y Estíbaliz Martínez que se entienden muy bien, por lo menos así lo hicieron durante la anterior CGDN.
Actualmente el Secretario General de Podemos Navarra, con residencia permanente en Madrid, ha abierto un expediente a la ex Secretaria General Laura Pérez y escudándose en la comisión de Coordinación que más bien parece una gestora integrada por personas que formaron su candidatura 20M para no llevar el debate de las cuestiones al CCN.
Con este proceder la comisión de coordinación rebusca cualquier actuación de la ex Secretaria General y abre un expediente de expulsión previo paso o envío a la CGDN para su examen. Es decir el actual Secretario General se lo envía a su excompañera Estíbaliz Martínez para que examine su dictamen.
Estíbaliz y Eduardo ya se entendían muy bien entonces y manejaban ese órgano que dicen debe ser neutral, para sus propios intereses.
Nos encontramos con un órgano que se crea para velar por los derechos de todas las personas que pertenecen a Podemos pero que sin embargo se utiliza para lo contrario, para perseguir, para ser represor, para purgar, y al que llegan las denuncias públicas y manifestaciones del actual Secretario General con las que los casos ya llegan a la Comisión contaminados con su punto de vista subjetivo a la Comisión.
 Pero esta herramienta, a pesar de no estar conformada como debiera, es un arma de la que el Secretario General no se quiere desprender ya que de lo contrario perdería la dirección que él encabeza una de los instrumentos represivos. La Comisión será la encargada de ejecutar las purgas a la disidencia interna con su gran cantidad de expedientes disciplinarios, algunos tan absurdos como los abiertos hace unos días a perfiles de Facebook o a personas no inscritas en Podemos.
Pero el Secretario General  no se despeina ante estos hechos sino cuando menos se atusa el pelo y los aplaude y sigue hablando de la neutralidad del órgano del que él formó parte.
Eduardo Santos no puede hablar de garantías de la imparcialidad del órgano ya que lo conoce bien por haber sido uno de sus miembros, conoce bien y le son cercanas las personas que lo conforman y a lo único que se dedica con la Comisión de Coordinación es a abrir expedientes de sanción, expulsión y represión y pasarlo a sus miembros afines para que dictaminen y no solo con esto le basta sino que encima contamina saliendo en prensa diciendo cuál es su parecer para que así le quede más claro a la CGDN.

En derecho se conoce como prevaricación el acto de dictar a sabiendas resoluciones injustas. Si se dicta una resolución de apartar a una persona de forma cautelar a sabiendas de que es injusto eso es prevaricar por parte de las personas de la CGDN que se prestan a este el ejercicio más deshonesto y anti-deontológico para los profesionales del derecho.
Pero claro ya hemos dicho que profesionalmente en la Comisión ‘profesional del derecho’ solo hay una, su presidenta.
Existe una extensión de la figura de la prevaricación como ejercicio que comete el Secretario General Eduardo Santos. Le llamaría <prevaricación indirecta>, aquella que a sabiendas de abrir expedientes con unas determinadas causas lo que busca son otros objetivos y maquiavélicamente el envío de dicho expediente con el fin de que el órgano prevaricador ‘per se’ dictamine lo que él quiere para conseguir su fin último.
El Secretario General es abogado y sabe que no por no ser miembro de la CGDN deja de ser una persona prevaricadora que desprestigia la profesión.

Miguel Sanz de Jesús.

No hay comentarios:

Publicar un comentario