Estimada Irene,
Nos conocemos por la voz y no por la mirada, aunque quien nos conoce a los dos me ha dicho que eres una mujer intrépida, inquieta e inteligente. Por eso te escribo esta carta, que si no de amor es de cariño.
Me dicen que estás trabajando duro y participando de forma activa en ARANZADI, tras haber sido elegida para formar parte del Consejo Ciudadano de Pamplona y teniendo como al parecer tienes, una cierta relación de complicidad política con Laura Pérez.
A mí todo esto me parece muy bien, que conste.
Bien, llegados a este punto, te contaré ahora que entre los nuevos caciques que desgraciadamente han aparecido en el entorno de PODEMOS en Navarra, hay uno que es el más corrosivo y perverso de todos: Armando Cuenca. Aunque sean calificativos personales que al parecer en estos tiempos no está bien utilizarlos, todos los calificativos que se puedan poner, créeme, se quedan cortos.
Este es otro amo y señor, de los que hace casi tres años coparon el poder que prestó altruistamente la gente desde la buena fe y la confianza, porque tenía hilo directo con las alturas, en este caso con los Comunes, y así se pudo hacer su espacio de poder, omnímodamente y sin respetar a nadie que lo cuestione.
En este tiempo, junto con su mano kasatchov, Aitor Balbás, han destrozado toda la posibilidad de que en Iruña la gente pueda participar en la política municipal desde el municipalismo, dado que su engreimiento y sus incapacidades han logrado que la gran mayoría de las más de cien personas que un día pasaron por ahí para tratar de aportar un grano, llegaron hasta el día en el que habían visto tanto que ya no quisieron volver.
Es un cacique, como los caciques de mi pueblo que saben comprar la voluntad de los hombres, y la ha comprado a golpe de miseria.
Pero donde Armando es un nota, es con las mujeres.
Escucha y lee esto atentamente, Irene: son bastantes las mujeres que como tú, intrépidas inquietas e inteligentes, a las que ha destrozado su vida política para siempre. Te voy a decir a continuación, algunas frases que me han dicho a mi personalmente algunas de estas mujeres al salir huyendo despavoridas de su garras:
-A mí, me ha sometido a ocho meses de tortura...
-En cuanto queda en evidencia, porque es un ignorante, ya no piensa mas que en cómo amargarte la vida para que te vayas...
-No hace nada, es un machista furibundo, todo se lo hemos hecho nosotras... luego nos ningunea y nos desprecia...
-Es un vago que no sabe hacer nada mas que marear las cosas para llamar la atención...
-A él la gente no le importa nada, solo le importa dar la nota con cuatro ideas peregrinas que corren por su cabeza...
-Gentes como Armando son las que destrozan el futuro de la izquierda...
No quiero decirte más para no agobiarte, pero esto es lo que hay y te lo digo para que lo sepas.
Espero y deseo de verdad, que no seas otra mujer a la que despelleja el alma.
Miguel Sanz de Jesús.
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